Propósito

Comentarios, críticas, reseñas, opiniones y datos curiosos sobre las películas, series y caricaturas que de alguna manera me han valido la pena para elogios, burlas, inspiración, berrinches ó admiración.

domingo, 28 de febrero de 2010

El Hombre Lobo

El año pasado había mencionado a esta cinta como parte de los remakes que se esperaban para estos años. Confieso que no vi la original (estrenada unos sesenta años antes de que yo naciera), pero según tengo entendido, es parte de la era de los "Monstruos Dorados" de Universal, a los cuales también se les hizo un homenaje en la fallida "Van Helsing".
El Hombre Lobo llegó con un intenso trailer que prometía grandes dosis de acción y terror, vamos, además del conflicto interno "hombre bueno vs. bestia mala" y el del ya clicheado "recuerda quien eres realmente" cuando el lobo está a punto de matar a su amada. Bueno, todo eso se va al caño en el producto final.
La seriedad presentada en los primeros segundos se cae cuando el horrendo título es presentado, en lo que parece más parodia que homenaje, al más puro estilo de los 40. He visto maneras de hacerlo así sin que se pierda la dignidad, pero ésto de verdad me quitó cualquier expectativa de  verla como algo "de a de veras".
Y bueno, conforme pasan los primeros veinte minutos y tooooda la trama es presentada a grosso modo, empieza la conversión de David Talbot en el mítico Hombre Lobo. Asimismo, se nos da a entender de manera muy obvia que su propio padre es el Hombre Lobo que lo convierte. Vistazos muy buenos sobre sus nuevas habilidades se intercalan con el inicio de la relación entre Benicio y la viuda de su hermano, mientras que se atisban ciertos flashbacks a la infancia de David.
Todo este coctel de background, empero, se desvanece para siempre cuando entra en escena el personaje de Hugo Weaving, un agente de Scotland Yard que al parecer falló en las pesquisas para atrapar a Jack el Destripador, otro buen detalle referencial de la época. Así, las investigaciones sobre los asesinatos de inmediato se centran en el joven Talbot, y en los encuentros entre éste y Weaving siempre queda en el aire una "catch-frase" como la famosa "Mr. Anderson, surprised to se mee?".
Finalmente, llega la esperada primera transformación, y después de unos efectos baratos, aparece un hombre lobo bastante... patito, por así decirlo. Y es que querer empeñarse en crear un monstruo únicamente a partir de maquillaje en ésta epoca digital ya no resulta tan convincente. Es decir, se ve bien, pero las articulaciones del lobo, las garras, y Benicio... hacen una cuasi botarga de monstruo. Además, no acabé de entender sus motivos para atacar personas, y aquí bien se puede mencionar que "es un p&$o lobo, no necesita motivos", pero vamos, claro que sí... ¿no es su propósito alimentarse mientras están en fase monstruosa? Bueno, éste parece no decidirse sobre su presa. ¿Será que sólo coma pulmones o riñones, o las partes blandas? Quien sabe. Mata a uno y a otro, se come un trozo de aquí y otro de allá, como si de un buffet se tratase. No se trata de un "slasher film" común, en donde una víctima muere a la vez. No, éste parece ser más un asesino en masa cruel y despiadado, que disfruta a sus presas con el mayor sadismo y sufrimiento posible.
Lo peor es que la personalidad de Talbot en nada se decanta sobre su contraparte lobuna, no tiene destrampes de doble personalidad al estilo Jekyll y Mr. Hyde, ni una naturaleza oscura que guarde... es simple ira animal.
Y así, la última parte se diluye entre los sesenta minutos restantes, yendo desde una reclusión forzada en un manicomio hasta un destrampe en el centro de Londres, donde Talbot aprovecha a esconderse en la casa de la viuda del hermano. Aquí hay una escena muy divertida por lo absurda que es, y es cuando Weaving llega a advertirle sobre lo peligroso que puede ser al estar transformado, y como prueba le muestra un periódico con RETRATOS HABLADOS de sus ataques la noche anterior. Así como se lee...  en esos años no habia nada más contundente para convencer a una dama de la peligrosidad de un hombre lobo que unos dibujos de la bestia para lograr credibilidad. 
Y bueno, el final tampoco esta excento de ridiculeces, como la absurda victoria de Benicio sobre Hopkins, quien le lleva muchas décadas de experiencia como para terminar siendo decapitado de la forma más tonta. Para acabarla de amolar, Weaving, mordido por Talbot, protagoniza el cliffhanger para la secuela.... soltando un aullido cuando todo parece haber quedado en paz. Asco de película.

El Libro de los Secretos

The Book of Eli. El tráiler la sitúa dentro de la ciencia ficción, en un futuro postapocalíptico, igual de crudo y violento que el de Mad Max. Pero detrás de la apariencia se esconde un mensaje cristiano, muy sutil, que en realiad llega a ser tocado en pocas ocasiones, pero que a la vez se constituye en la columna vertebral de la historia.
Personalmente, no suelo degustar películas gringas con mensajes cristianos, ya que todo termina siendo tan superficial como su versión de la Navidad. Siempre son los mismos versículos citados, el mismo mensaje, nunca se busca una vuelta o un enfoque distinto al de "no olvides que murió por tí" y que, a pesar de que éste sea el mensaje nuclear de la religión, no es mostrado con autenticidad y calidez.
Sin embargo, TBOE (siglas) logra entregar un mensaje apegado a la realidad que se vive hoy día: guerras cada vez más letales por la religión, fanáticos que sólo usan la Palabra de Dios para ejercer un estricto control sobre las masas, y aquellos ignorados que sí logran vivir bajo los preceptos cristianos. Todo esto después de un holocausto cuyo origen se debió a una guerra religiosa.
Lo mejor de todo es que el mensaje de salvación viene hasta el final, y no se pregona melosamente a lo largo de la trama. Por otra parte, más que retratar a la Biblia como EL libro y al cristianismo como LA religión (a la "my way or the highway"), TBOE lleva un mensaje de la fe como la salvación de la humanidad, sea lo que sea en lo que se crea, la fe puede mover montañas y hacer que un ciego vea el camino con toda claridad.
Las actuaciones son buenas. Denzel destaca como el héroe, como ya es habitual en él, mediante intrincadas formas de pelear, mientras se hace camino para llegar al Este con el libro en su mochila. Tal vez no sea su mejor interpretación, pero el papel de profeta friki le queda de maravilla.
Gary Oldman, en contraste, regresa a lo que mejor le queda: ser un odioso villano. Está bien, el camaleónico actor puede ser un excelente Sirius Black y un creíble Comisionado Gordon, pero parece que hasta se lame los bigotes al protagonizar personajes que son realmente odiosos, esos que a leguas se ve que están dañaditos del cerebro.
La chavita esta que acompaña a Washington no brilla ni opaca, simplemente hace un papel decente como un personaje de apoyo, encarnando al humano promedio que nació después de la guerra y que por ende, creció analfabeta.
Algo bastante destacable es la fotografía y los tonos manejados: una escala verdiamarilla que da la sólida nocíón de una Tierra devastada, contaminada, hostil e inhóspita. Los ángulos y las tomas abiertas aportan al sentimiento de soledad apocalíptica, y el montaje de destrucción es lo suficientemente descriptivo, sin llegar a parecer limitado o exagerado.
En fin, una buena película que podría ser criticada por su amplio discurso religioso, pero que logra sortear la barrera del libre credo con el mensaje de fe y esperanza para una sociedad quebrada y deformada.

sábado, 6 de febrero de 2010

Actividad Paranormal

Después de mucho dudar, entramos a ver esta película que ya llevaba mucho tiempo en cartelera. Indudablemente eso debería ser una buena señal, si a la gente le gusta, puede que sea buena. Error. Actividad Paranormal llega como una película al más puro estilo de El Proyecto de la Bruja de Blair, es decir: bajo presupuesto, actores desconocidos, y una muy buena campaña para elevar el hype. Eso de "basada en hechos reales" realmente atrae a la gente como si olfatearan un pastel de manzana secándose en una ventana, y muchas veces la decepción es mayúscula. Si esta película hubiera estado en mi lista de "quiero ver esa", tal vez hubiera despotricado al final con mayor fuerza, pero como ni me llamó la atención, la consideré como una cosa "X", lo que merece ser.

++ El terror en reality show ++

Eso de darles cámaras a los actores para que prácticamente filmen toda la película funcionó bastante en la Bruja de Blair, y hasta Cloverfield logró que se viera creíble, pero cuando tienes a dos actoreas que de plano no logran dar el ancho en pantalla, el que se paseen por la casa con una cámara tratando de grabar un fenómeno resulta bastante simple y tonto. Aunque cabe mencionar que el suspenso creado es mayúsculo, y por ello, el error más grande es mostrar al terror como una especie de reality show, pues entre más suspenso se crea, mayor puede llegar a ser la decepción cuando el "susto" no de el ancho.
Bueno, la trama. Katie (sin apellido) y su novio (Micah) recientemente se mudaron juntos a una casa, y de una fecha X al día de hoy (en la película), extraños sucesos paranormales han comenzado a aquejarlos. Katie menciona que dichos sucesos ya le habían acaecido cuando era una niña, y aunque nunca se pudo comprobar, la "presencia" había provocado un incendio en su casa donde murió parte de su familia. Micha, manteniéndos escéptico, compra una cámara de super alta definición para documentar los sucesos mientras duermen, esperando encontrar una explicación racional. Así, comienzan a ser víctimas de un demonio (según lo determina un médium que acude a evaluar la situación), que busca atormentar a Katie. Y de esta manera, el terror comienza a desenvolverse.

++ Lo que pudo funcionar ++

La premisa suena interesante, e incluso la realización en principio pudo ser buena, pero al final de cuentas, el suspenso no llega a resolverse con el merecido "susto", y la línea de tensión se eleva y eleva sin fin, hasta que al final cae estrepitosamente, justo cuando el espectador "demanda" silenciosamente una de dos: o un enfrentamiento con la manifestación real del espíritu, o una explicación (aunque fuese vaga) de por qué la entidad afectaba a Katie o algooo, pero no, no se resuelve nada.
Las escenas de miedo sí crean un suspenso, puesto que la cámara no siempre capta lo que los actores ven, o los acontecimientos en plano abierto, sino que a veces se asoma por un rescoldo entre las paredes y puertas, y en ocasiones ni siquiera está presente en el campo de acción. Esto crea una atmósfera de "déjenme ver", causando una elevación en la tensión bastante eficiente, pero como dije antes, de plano no encuentra una cohesión.

Zombieland

Esta película, gracias a Dios, está pasando como un "sleeper hit" en las taquillas tanto estadounidenses como mexicanas. Sin requerir de grandes dosis de publicidad, Zombieland logró colocarse dentro de los gustos del público "de culto". Con ganas de verla desde su estreno el año pasado en EU, tuve que esperar durante varios meses gracias a las super distribuidoras mexicanas, que les encanta ver si una cinta "pega" en el centro del país para poder enviársela a los cuates de provincia. 
Finalmente, la semana pasada nos lanzamos a verla unos amigos y yo, y debo decir que no me reía tanto en un cine desde hace mucho tiempo. 
Zombieland maneja un gran equilibrio de contenido para su género, además de hacer gala de un humor bastante variado. Destacan las reglas del protagonista para sobrevivir a los zombies, las personalidades opuestas entre los protagonistas, y el gracioso cameo de Bill Murray. 
En los foros de IMDb se destaca también la genial secuencia de introducción, que incorpora créditos susceptibles a las acciones en pantalla y la hermosa rola de Metallica "For Whom The Bell Tolls", como fondo. Esta secuencia me recordó mucho al intro de Watchmen, pero no deja de verse espectacularmente genial con zombies atacando en cámara lenta en las situaciones más absurdas.
La trama no es nada del otro mundo. Un sobreviviente, bastante geek por cierto, se embarca en un viaje para encontrar a su familia luego de que una invasión zombie acabe con Estados Unidos como se le conoce, convirtiéndolo en Zombieland. En su camino se atravesarán excéntricos personajes que al final entenderán que sólo juntos lograrán sobrevivir a ese mundo postapocalíptico.
Pero fuera de esto, la trama de la película toca, en muchos aspectos, lo que los sobrevivientes comunes y corrientes 

++ Frescura histriónica ++
Los actores, así como la misma película, no son del todo convencionales, y tampoco resultan del agrado de todo mundo. Columbus (Jesse Eisenberg, de Adventureland), el protagonista, es un introvertido geek universitario con demasiadas fobias como para ser contadas. El es el que lleva la narración de la película, así como el inventor de las reglas para sobrevivir a los zombies. Woody Harrelson es Tallahassee, un hombre atormentado por el dolor en búsqueda del último remanente del mundo civilizado al que solía pertenecer: un Twinkie. Finalmente, las hermanas estafadoras Wichita (Emma Stone, de Superbad) y Little Rock (Abigail Breslin, de Little Miss Sunshine) van y vienen a placer, cuidando únicamente de ellas mismas. Juntos, ocurren un sinnúmero de situaciones espontáneas bastante cómicas, y aún los diálogos y sucesos que no están apuntando a unas carcajadas, también pueden sacar una o dos sonrisas.
La música es otro punto muy fuerte para la película. Destaca, como dije al principio, Metallica en el intro, pero se incluyen también participaciones de Band Of Horses, The Doves, Metric, Van Halen, The Velvet Underground y... Mozart. Así de variado está el soundtrack. Y cabe mencionar que la música funge como un gran complemento para armonizar la estética visual de la película, bastante cuidada, por cierto.

++ Las reglas ++

Por último, las reglas establecidas en Zombieland para sobrevivir a una invasión zombie:

#1. Cardio
#2. Cuídate de los baños.
#3. Cinturones de seguridad.
#4. Doubletap (tiro de gracia).
#5. No tener relaciones sentimentales.
#8. Matar con eficiencia.
#15. Conoce la salida.
#17. No seas un héroe.
#18. Calentamiento.
#24. Mantenerse sobrio.
#31. Checar el asiento trasero.
#32. Disfrutar de los pequeños momentos.


martes, 2 de febrero de 2010

2:37 ¿Quien morirá hoy?


Hace unos días me encontré con esta propuesta australiana justo cuando daba comienzo en uno de los canales de MovieCity.
A pesar de ser criticada como un plagio a "Elefante" de Gus Van Sant, película con la que comparte numerosos detalles técnicos, este drama de adolescentes logra crear una atmósfera propia con un mensaje muy distinto del ofrecido en la otra cinta. El título, más que eso, es una promesa. Se refiere a que alguien morirá a las 2:37, de eso no se escapa. La pregunta, es ¿quien?
Apenas comenzar, 2:37 ("¿Quien Morirá Hoy?" en español) presenta a la serie de protagonistas (todos ellos candidatos a morir) de una manera interesante, combinando una introducción de la vida de cada uno de los adolescentes de la historia, combinándolos con testimonios personales en blanco y negro, como si de un documental de tratara. De no ser por este elemento, la introducción de la película parecería un capítulo más de Degrassi o Beverly Hills, es decir, sus vidas presentan, en su mayoría, los clichés americanos adolescentes (deportista mamey, niña ilusionada con ser novia del deportista, gay señalado, nerd que quiere sobresalir, etc.).
Sin embargo, a medida que se desentrañan algunos secretos, y con éstos los verdaderos problemas que aquejan a los protagonistas, salen a relucir también las relaciones entre un grupo de jóvenes que al principio parecía inconexo.

++ ¿Plagio u homenaje? ++

En los foros de IMDb ya se desató una batalla campal entre los defensores de Gus Van Sant y aquellos que apoyan el discurso deMurali K. Thaluri, en cuanto a si el filme es un plagio de Elefante. Y si bien es cierto que 2:37 retoma algunos elementos técnico-narrativos de la obra de Van Sant, también es cierto que los argumentos difieren bastante, a pesar de que ambos se centran en problemas adolescentes. Elefante se enfoca en la ira reprimida de los adolescentes, que de pronto encuentra su punto culminante en el tiroteo de la preparatoria, emulando una hipótesis sobre lo ocurrido en Columbine. Veamos a detalle.

1. Lo visual
Van Sant, con su espíritu innovador en cuanto a imagen, y su desdén por la calidad de las actuaciones, creó unas escenas memorables con el uso de largos "travels" a los protagonistas, creando un múltiple enfoque al usar los puntos de vista de varios protagonistas. Conforme se avanza en la historia, nos percatamos de varias cosillas que estaban ahí, pero que fueron ignorados en el "segmento" anterior.
Thaluri replica el recurso en una especie de "homenaje" al filme de Van Sant, de acuerdo a su propio comentario, y no lo hace de mala manera, pues al crear una atmósfera de misterio y suspenso, las revelaciones no son meros detalles, sino inesperadas sorpresas que pueden significar giros de tuerca a la historia. Por ejemplo, una discusión secreta en un baño aparentemente vacío, de pronto se convierte en una sorpresa para otro personaje que estaba escondido en el baño.

2. El contenido
Ambas pélículas se centran en los problemas adolescentes, eso se nota desde el primer cuadro. Pero mientras el guión de Elefante centra los protagonismos en las víctimas del tiroteo horas antes del fatídico evento, y deja la perspectiva de los asesinos casi al final y abordado brevemente. Recuerdo grandes cargas silenciosas, y mucha descripción de la atmósfera escolar para que el espectador deduzca las razones por las cuales los chavos se convierten en elefantes enardecidos que cargan contra todo lo que ven a su paso. En la historia no se abusa de los estereotipos y clichés como tal, pero sí se logran definir los diferentes tipos de presión social que gobiernan a esa preparatoria, y en general a las del país.
2:37 maneja un intecrambio en la narrativa, presentando a todos los personajes bajo la premisa de que uno de ellos morirá a esa hora. Conforme transcurre la historia, se insertan comentarios de los personajes narrando su opinión en determinada situación, narrando sus pensamientos ante la dificultad de lograrlo mediante una narración visual. Esta incorporación es quizás la mayor innovación del guión, que ayuda a explicar la atmósfera interior del personaje ante la atmósfera exterior.

3. Las actuaciones
Gus Van Sant se ha decantado de facto por actuaciones amateur, descontando sus excepciones (My Own Private Idaho y no recuerdo si otra), pero desde Mala Noche quedó claro que al director le interesa más la cuestión visual y el contenido que si al protagonista le resulta creíble pasar por mexicano, aunque su acento sea completamente distinto. En Elefante, vuelve a recurrir al casting de desconocidos, tratando de lograr una expresión natural de los actores, sin que realmente se vea un gran trabajo de desprendimiento hacia el perfil del personaje requerido. Vamos, algunos de los actores hasta fueron reclutados en escena, con eso puedo plasmar perfectamente el grado "indie" en lo que a casting se refiere.
Thalluri también copió el esquema, y aunque no me consta que el reclutamiento de desconocidos haya sido intencional, algunas de las actuaciones son claramente el primer trabajo del chavo frente a la cámara. Hay unos personajes que son interpretados con más fuerza y otros con más indiferencia, pero todos logran dar el ancho para lo que la película les requiere, por lo que las caracterizaciones bien pueden funcionar.